Llega la noticia por ABC de España que "El sudafricano Oscar Pistorius se aseguró un puesto en la historia del atletismo al convertirse, y ganando un puesto en semifinales de 400, en el primer amputado que compite en unos campeonatos del mundo junto a los atletas sin discapacidad física".
El Campeonato Mundial de Atletismo se disputa de Daegu, Corea del Sur. Aquí el vídeo de la carrera:
La historia de este atleta conocido con el apelativo de "Blade Runner" es una verdadera lección de vida. En octubre de 1987, sus padres, Henke y Sheila Pistorius tomaron una de las decisiones más duras de su vida. Dieron permiso para que los médicos amputasen la parte inferior de las piernas a su bebé de once meses que sufría una complicada enfermedad degenerativa. Esto marcaría la vida de Oscar, que aprendió a vivir desde muy pequeño con dos prótesis en lugar de gemelos.
Las prótesis que le han hecho famoso son fabricadas por Össur, empresa de Islandia que le puso por nombre "Cheetahs", imagino en honor al Guepardo, el animal terrestre más veloz del planeta. Si observamos correr a uno de estos animales nos daremos cuenta de cierta similitud con la forma anatómica de las prótesis. Un par de estas cuestan más de 20 mil dólares.
Los triunfos alcanzados en competiciones paralimpicas, lo pueden encontrar en Wikipedia
Para algunos, Pistorius no debiese participar en competencias con personas normales (que mal suena esto de normales) porque lleva ventajas al tener prótesis que no se cansan y que pueden cambiarse si sufren alguna herida. El se defiende alegando que si eso fuese así, otras personas con prótesis estuviesen participando.
Personalmente, considero alucinante este momento... por un lado estamos ante el encuentro entre el hombre y la máquina, el inicio de una simbiosis producto del adelanto tecnológico que abre las puertas a un nuevo futuro.
Por otro lado, Oscar Pistorius representa el triunfo ante la adversidad, la superación personal, la voluntad de hierro producto de una gran fuerza interior. Todo deporte no sólo es músculo, también es corazón, garra, ganas de competir, de ganar. Su madre fue una gran inspiración, cuando él tenía 1 año le escribió una carta para cuando fuese mayor, entre otras cosas le decía:
"Un perdedor no es quien llega último, si no aquel que se sienta y mira y nunca a intentado correr"
"Un verdadero espíritu invencible, rebelde, es aquel que busca la felicidad en esta vida. El querer lo es todo, si quieren ser felices lo serán. Es la voluntad que transporta las montañas"
"El amor, la voluntad, el deseo y la pasión de cumplir los sueños son las alas del espíritu de las grandes hazañas."
Hoy, al iniciarse la carrera, estoy seguro que su madre a lo lejos le susurraba: "Run, Oscar, Run"....
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