Ayer se estrenó en España le película Amador de Fernando León de Aranoa que lleva como protagonista a nuestra Magaly Solier... excelente noticia para los que nos gustó su actuación en Madeniusa y la Teta Asustada. Lo interesante que Magaly va consiguiendo espacio en el tipo de cine que te deja pensando luego del final, que llama a la reflexión, a la búsqueda interna de nuestro yo, al que la complicidad del actor nos hace meditar sobre nuestras historias, a divertirnos sutilmente sobre nuestros recuerdos...
Marcela es una mujer joven en apuros económicos que encuentra un trabajo para el verano cuidando de Amador, un señor mayor postrado en cama, en ausencia de su familia. Cree ver así sus problemas resueltos, pero a los pocos días Amador muere, dejando a Marcela en una difícil situación. Su fallecimiento la deja sin trabajo, y eso es algo que ella no se puede permitir...
Enfrentada a un difícil dilema moral, Marcela va a demostrar que no siempre la muerte puede detener la vida.
El director presenta su obra:Fernando Léon de Aranoa Director de "Amador":
¿Cómo es Magaly personalmente? Magaly ha sido la cómplice perfecta para hacer Amador. Es la primera película que hago tan centrada en un sólo personaje, y esa complicidad era fundamental. Como actriz creo que es prodigiosa, tremendamente elocuente y a la vez muy sutil. Trabaja con el instinto, con la emoción, pero además de eso tiene una enorme técnica que te permite, como director, incidir sobre lo que está haciendo, pedirle cosas… Y eso ya no es tan habitual. De dónde la ha sacado siendo tan joven como es resulta para mi un misterio.
Luego de la Teta Asustada, Magaly Solier reaparece en una peli española. Es increíble cómo en tan poco tiempo, la chica que vino a Lima a los 10 años para trabajar como empleada del hogar de su tía, ha podido ganarse un lugar en el mundo del cine.
"...A Magaly Solier el destino le sonrió en la plaza de Huanta. Vendía puca picante para poder viajar al Cusco con sus amigas de promoción, cuando conoció a Claudia Llosa, una joven directora que andaba buscando a su protagonista.
¿Quieres actuar en una película?, le preguntó y Magaly contestó que sí ni bien conoció su identidad. Había leído a Mario Vargas Llosa y que alguien llevase uno de sus apellidos le parecía suficiente garantía de seriedad. Al año de ese encuentro y justo un día antes de que terminase la secundaria, recibió una llamada. Era Claudia y esta vez le pedía venir a Lima, para realizar una prueba. El resto de su historia es otro guion de película. Llegó y venció a las actrices profesionales. Llegó y se hizo Madeinusa".
Fuente: El Comercio
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