27 abril 2008

La máscara del poema+

Por Nicole Barrière

Nota de un evento vallejiano en París

El gran Homenaje Internacional en París realizado el 15 de abril pasado en la Casa de América Latina, fue un éxito por la calidad de los participantes. De este homenaje se retendrá la participación de Stephen M. Hart (Gran Bretaña), especialista renombrado de la obra de César Vallejo, quien presentó uno de sus mejores y más cálidas reflexiones sobre la vida y la obra del gran poeta peruano. El título de su trabajo es «Las máscaras de César Vallejo». ¿Cuál es la observación de Hart? Resumamos la parte fundamental y al mismo tiempo transparente de esta exposición que inspiró el bello texto a Nicole Barrière que acá se reproduce: la máscara expresaría «el enigma entero del ser». Con sus máscaras, Vallejo «permanece misterio, y está bien que así sea!», ha escrito precisamente Nicole Barrière. La contribución de Edgar Montiel, «La prosa del poeta Vallejo», se refiere a las crónicas que Vallejo enviaba a los diarios latinoamericanos, incluyendo los de Lima. La interesante comunicación del joven colombiano Ricardo Arcos-Palma se refirió al trabajo poético de Vallejo en relación con la pintura, correspondencia que la crítica «vallejiana» no ha abordado aún.

Carlos Henderson y Nicole Barrière en el Homenaje
Internacional a César Vallejo, París
(Fotografía de Carlos Gayoso.)

Debemos mencionar la brillante selección de los poetas presentes como Jacques Darras, destacado especialista de la poesía inglesa y norteamericana, quien exaltó los méritos del poeta César Vallejo y de su impulso poético que, según Darras, le permite alcanzar el mismo nivel que, por ejemplo, Walt Whitman. El poeta Jacques Darras leyó algunos poemas de Vallejo en francés y Françoise Morcillo inmediatamente después los leyó en la versión original. Al final de su intervención, esta especialista y traductora de la poesía española, dio su opinión sobre la poesía de Vallejo , al mismo tiempo que hizo una aproximación entre Vallejo y TristanTzara: es otra contribución de este evento. Nos felicitamos por la participación del actor Guy Lavigerie, quien leyó en francés poemas de César Vallejo.

Hay que poner de relieve la selección importante de los poetas de distintos países y lenguas que intervinieron en la reunión, como la poeta francesa Claude Ber acompañada por la actriz y contralto Frédérique Wolf-Michaux; la sensible lectura del poema de César Vallejo «Masa» por Nicole Barrière, así como la voluptuosidad de las imágenes de sus propios poemas. Fue especial la participación del poeta Pierre Clavilier, ya que este poeta francés leyó poemas escritos en español y, por cierto, en français. La poesía «engagée» tuvo su portavoz en el poeta haitiano Gérald Bloncourt; y la poesía de la experiencia interior por la voz del poeta griego Dimitris Kraniotis; luego, la poesía del doble por el poeta argentino Hugo Herrera y la poesía de los mitos latinoamericanos por la colombiana Luisa Ballesteros. La colombiana Myriam Montoya propuso su poesía de la experimentación y la mirada interiorizada. La poesía de la rebelión y de lo inefable por el poeta rumano Dinu Flamand, quien leyó una de sus traducciones al rumano de la poesía de César Vallejo; la fuerza de la poesía de Vallejo se siente totalmente en la lengua rumana. La prosa poética ha estado representada por el peruano Mario Wong.

Es digno de poner de relieve la prestación musical de un grupo exquisitos artistas argentinos especializados en la música barroca latinoamericana de los siglos XVII y XVIII. Este grupo dirigido por Federico Yacubson (viola de gamba) está conformado por Bárbara Kusa (soprano), Gabriela Gómez (soprano) y Ariel Rychter (virginal).

Carlos Henderson, Presidente de la Asociación Amigos de César Vallejo


El poema, el análisis del poema, el enigma del dolor de vivir, la experiencia límite de la travesía estuvieron presentes este día en el auditorio de la Casa de América Latina. El homenaje a César Vallejo revistió los distintos trajes con los cuales cada uno pretende reconocerse y en el espejo extrañamente vacío colocó la máscara, artefacto frágil de las voces. Voz de rememoración, de investigación lo más cerca posible de la vida con el enigma entero del ser, César Vallejo sigue siendo misterio ¡y está bien así!

La densidad de su humanismo vinculada al amor inalterable y constante de Georgette, la humana esposa que transfigura la carne del destino de Vallejo, que interpreta lo íntimo del poeta para entregárnoslos, desafiando de esta manera a los exégetas, aquellos que creen saber cómo habla la lengua.

Además, ¿qué saben de la experiencia viva que fue la de Vallejo, la rebelión y la inscripción de esta rebelión en el corazón mismo del poema?

Georgette Vallejo sabe menos que cualquier otro pero sabe más, sabe del amor de un hombre atrapado en la tormenta de su tiempo, la pretensión apasionada de la libertad, la conciencia de la solidaridad, el balbuceo y buceo de la lengua donde surge el poema, donde se ajetrea y agita la enfermedad y la muerte, y que sabe dónde la alegría y el amor fueron las primeras palabras-puente del hotel donde él vivió al apartamento donde vivía ella con su madre.

Ella conoce la importancia de los textos encontrados debajo del lecho después de la muerte de Vallejo. Ella —dicen los exégetas— que no sabía lo que su marido escribía; pero ella entiende que se trata de «poemas humanos»; no obstante, hay que ser elegantes si no indulgentes con las separaciones que ella establece entre los períodos, cuando cambia los títulos porque es para hacer conocer y defender la poesía de su hombre... contra todos.

Las propias máscaras de Vallejo y las máscaras producidas por Georgette, ¿no es el mismo humano sueño que las reúne?, ¿no es la misma apariencia frágil de poetas que las guía? ¿No es el drama de la pérdida que anima a Georgette, de ausencia en ausencia, de destrucción en destrucción, y no es el amor lo que la orienta en esta empresa, haciendo justicia a su esposo más allá de la tumba?

Es hermoso que en las pasiones que sigue suscitando la poesía de Vallejo se eleven múltiples voces para defender a la viuda, ya que se afirma la fuerza y la convicción de las mujeres para defender la nobleza de los hombres.

Hubo un momento privilegiado y conmovedor en este día del Homenaje a Vallejo cuando, en el paseo que nos condujo sobre sus huellas en la calle Molière y la avenida de la Ópera **, las interrogantes nos invadían y atravesaban para intentar aprehender la fugitiva característica de un amor tendido entre dos orillas.

Tiempo reversible e instante de eternidad de la poesía, su incertidumbre vital y vigilante de la espera y de la ofrenda.

Al igual que Vallejo, nosotros no advertimos lo que dicen nuestras máscaras; enredamos, confundimos las pistas del poema, trabajamos el poema palabra por palabra de la lengua para intentar abrir el misterio, «embarcados» en nuestro tiempo.

Lo digo sin ambages: Vallejo forma parte de nuestras raíces y nuestras memorias. Dentro de nosotros, hay rastros plenos, «hay golpes en la vida, tan fuertes... yo no sé».

Luego los rastros de Poemas humanos, que fue el título-máscara otorgado por su esposa con cierta fortuna, y luego los poemas de Vallejo de España, aparta de mí este cáliz , que nos convocan a las tierras de exilio de la poesía.

Tierras de exilio que conoció, retengo tres:

—la tierra del exilio del país de donde parte, Perú, donde su ausencia se echa de menos, ya que la pérdida de un poeta es una pérdida en primer lugar para el país, para la comunidad de acciones e ideas que se privan de su esencia. Perú, donde hoy es el más grande poeta, pero dónde se le detuvo para que sucumba en prisión;

—la tierra de exilio de Francia y España donde vivió, Francia de donde se le expulsa y donde se tarda hoy en reconocer su obra;

—exilio finalmente del territorio mismo del poema del que, sin embargo, triunfa porque Vallejo lo convierte en un lugar de unión entre el exiliado y los otros, donde la singularidad de su ser se incorpora a «todos» y como lugar otro de la pérdida, lugar acontecimiento, lugar ofrenda de la máscara donde puede alcanzarse una parcela de verdad humana.

En el Homenaje Internacional rendido a Vallejo por la Asociación Amigos de César Vallejo en la Casa de América Latina, en París, el día aniversario de su muerte, fue la ocasión de oír y hacer oír las voces «de la poesía viva internacional», como gusta calificarlas su Presidente, Carlos Henderson.

Cualesquiera que sean las máscaras que se mostraron, cualesquiera que sean las lecturas de la poesía de César Vallejo que se hicieron, esta tensión entre el compromiso de la lengua verdadera y lo dramático del existir y el ser, fue un éxito. Más aún un momento de comunión con la poesía.

* * *

+ Traducido del francés por Carlos Henderson.

* Tema central de la intervención, de la conferencia magistral de Stéphen M. Hart, reconocido especialista de la obra de César Vallejo: "Las máscaras de César Vallejo". Traducción de Carlos Henderson.

**Paseo-recogimiento guiado por Stephen M. Hart en compañía de Carlos Henderson, Pierre Clavilier y yo misma.


© 2005, Nicole Berriére, Carlos Henderson
Escriba a los autores: Carlos.Henderson@wanadoo.fr
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Para citar este documento:
Barrière, Nicole y Carlos Henderson: «La máscara del poema - Homenaje a Vallejo», en Ciberayllu [en línea] , 27 de abril del 2008.
<http://www.andes.missouri.edu/andes/Cronicas/NB_Vallejiano.html> (Consulta: 27 de abril del 2008).

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